Este lugar es súper tranquilo y nos encantó. Los jardines son muy bonitos y perfectos para pasear y disfrutar. Además, hay un montón de tumbonas en la piscina para todos.

Está un poco lejos de la medina de Marrakech, pero eso puede ser un punto a favor para algunos.

Me ha encantado la impecable limpieza de todo el lugar, la deliciosa comida y las vistas asombrosas. La habitación contaba con comodidades como un minibar, una caja fuerte y una zona de comedor, además de una cama bastante cómoda. La ubicación es excelente y el personal ha sido muy amable y atento durante toda mi estancia. El barrio Agdal es digno de ser explorado y el restaurante, que sirve comida marroquí, es fantástico.

Ubicación: el hotel estaba no muy lejos del centro de la ciudad, también del mercado nocturno. Además, estaba hacia las montañas. Cama súper cómoda, habitación nueva, baño grande. La mejor parte fue la vista asombrosa al jardín...

¡Qué lugar tan encantador! Me encantó la decoración del hotel, especialmente las áreas comunes. Era como estar en un auténtico palacio marroquí. Además, el hotel era muy accesible para personas mayores como yo. Había ascensores en todos los edificios y el personal siempre estaba dispuesto a ayudar con cualquier necesidad que tuviéramos.

Me hubiera gustado que el personal estuviera más atento a las necesidades de las personas mayores. A veces parecía que los jóvenes que trabajaban allí estaban más preocupados por sus propios asuntos que por asegurarse de que todos los huéspedes estuviéramos cómodos.

El hotel es tranquilo y tiene un personal muy amable. Las habitaciones cuentan con televisión, teléfono y una cama doble.- El desayuno ofrece tortillas, alimentos continentales y huevo revuelto.- La ubicación es tranquila y excelente, cerca de todo.- A solo 3 km de lugares turísticos como el Cinema Megarama.

La cama era bastante buena. El hotel está impecable y en una ubicación tranquila y estupenda.- El personal es excelente y muy amistoso.- Proporcionan un desayuno con tanto huevos revueltos como yogur.- Ofrecen un servicio estupendo.- Cuentan con WiFi gratis.

¡Qué vacaciones más increíbles tuvimos con mis amigos en La Maison Des Oliviers en Marrakech! La mansión es espectacular, con una piscina enorme y habitaciones limpias y hermosas. El desayuno fue genial, con mucha variedad para elegir. Además, el personal fue amable y simpático. Nos sentimos seguros con la presencia del guarda en la entrada por las noches. ¡Nos encantó!

Lo único que nos faltó fue más diversión para jóvenes fiesteros como nosotros. Hubiera sido genial tener actividades nocturnas o una discoteca en el hotel.

Los servicios en la suite eran buenos, las camas súper cómodas. Había un minibar, una caja fuerte privada y una zona de comedor, que me pareció genial.

Ambiente relajado y instalaciones cómodas y amplias. Habitaciones espectaculares con piscina privada. Desayuno delicioso. Personal amable y atento. Gran seguridad con guarda nocturno. Hamam excepcional. Tranquilidad y belleza en medio de la Medina. Increíble piscina. Personnel maravilloso y atento. Habitaciones amplias y cómodas. Oasis de paz. Taxi dispuesto a llamada. Amplitud y belleza del hotel. Personal muy amable. Adecuado para familias. Cerca del centro y aeropuerto.

¡Una mansión preciosa con una decoración encantadora! Me encantó el ambiente relajante y los jardines llenos de olivos. Además, la accesibilidad para las personas mayores era muy buena. ¡Un lugar perfecto para disfrutar de unas vacaciones tranquilas!

Me gustaría que el personal fuera un poco más atento y considerado con las personas mayores. A veces, los niños que trabajaban allí parecían estar distraídos o no prestar mucha atención a nuestras necesidades.

La relación calidad-precio fue excelente, la habitación fue impresionante y el personal fue muy amable y atento. El hotel estaba ubicado en un lugar tranquilo, pero cerca del centro y el aeropuerto.

La selección de desayunos podría ser mejorar, pero nada importante.

Desde hace tiempo quería visitar el Observatoire Astronomie, y elegí La Maison Des Oliviers solo por esa razón. Sin embargo, lo que más me sorprendió fue el increíble equipo profesional de La Maison Des Oliviers. Estuvieron siempre a mi disposición y se aseguraron de que mi experiencia fuera inolvidable. Además, pude disfrutar de dos restaurantes y un centro de spa con hammam durante mi estancia. El chef me ofreció una variedad de platos de la cocina tradicional marroquí e internacional. También me encantó la Kasbah, que tenía baños turcos, una tienda y un restaurante en medio de su jardín.

Un poco apartado en un sitio de olivos abandonados y al principio piensas donde me estoy metiendo. Pero luego ya entras en la mansión y te sientes seguro.